Hace varios años que tengo un desafío personal y es poner el “método del diseño” (design doing) y el “pensamiento de diseño” (design thinking) al alcance de todos.
Este desafío no es porque si, sino porque veo en el proceso una forma práctica de abordar los problemas, visualizar el futuro y llegar a innovadoras soluciones. Más me motivo cuando imagino toda esa creatividad puesta en la base de la pirámide, es decir cientos de miles de “design thinkers” diseñando soluciones donde más se necesitan (design for the BoP), diseñando para la humanidad, no solo para el mercado.
El poder del mercado debiera ser un acelerador para que esto suceda, ya sea a través de la innovación en modelos de negocios, los emprendimientos sociales, las empresas B, el crowdfunding, sharing economy, etc. en definitiva si una solución no se conecta con el mercado, no es innovación.
Hace más de 10 años que el diseño está cambiando los cimientos de la gestión tradicional, hoy todo es diseño, todos los elementos del mundo han sido diseñados en respuesta a un problema, así sean tangibles o intangibles. La cuestión que toda esa concentración de diseño ha estado siempre focalizada en la cúspide de la pirámide, generando productos, servicios, sistemas, soluciones, etc. con el objetivo de generar más ventas y consumo – salvando las que realmente mejoran la calidad de vida de todos – en segmentos donde las necesidades básicas están más que resueltas.
El pensamiento de diseño, para mí, más que un método es una actitud, es buscar nuevos desafíos, experimentar, liarse, aproximarse, resolver y volver a empezar aplicando siempre una forma práctica de hacer las cosas sin caer en la superficialidad o falta de profundidad. Cada vez que se pasa por ese proceso se amplía la “zona de confort” y se arriba a un nuevo estado temporario de comodidad que de forma disruptiva, reiterativa y natural el “Design Thinker” buscará volver a ampliar.
El diseñador Arne Van Oosterom, desde Amsterdam ha venido tejiendo redes entre nosotros los “Design Thinkers” desde el 2007 que hoy se consolidan en tres iniciativas:
Con el mismo objetivo, de poner el diseño al alcance de todos y resolver problemas donde realmente se necesitan es que a partir de hoy desde innodriven dirigimos la red “Design Thinkers” en Argentina y Uruguay.